En el futbol mexicano los directores técnicos están casados con un sistema de juego y es muy complicado que se atrevan a cambiarlo, pues sería como traicionarse a si mismos, traicionar su manera de ver el fútbol. Pero hoy en la Corregidora, para sorpresa de muchos, el técnico americanista, Miguel Herrera dejó a un lado su famosa línea de cinco defensas, para darle lugar a un nuevo esquema; Herrera paró a su equipo en el campo con un 4-3-1-2, esto en gran medida para darle lugar en la delantera al flamante medallista olímpico, Raúl Alonso Jiménez.
Desde el inicio del juego, América fue muy superior a unos Gallos que no metían ni las manos. El equipo local aguantó los ataques americanistas, pero la caída de su marco era inevitable, y fue al minuto 10, trás un robo de balón de Jiménez, que el ecuatoriano Christian Benítez pondría al frente al equipo amarillo, quitandosé al portero con facilidad y mandando el balón a guardar. La Corregidora se convirtió en una sucursal del Estadio Azteca y estalló en jubilo, América tomó la ventaja en el partido que no soltó jamás.
Con el 0-1 las cosas no cambiaron. América siguió buscando la portería rival y Querétaro simplemente trató de resistir, pero nuevamente se impondría la superioridad americanista; en esta ocasión, Benítez fue quién asistió a Montenegro, quién con una recepción dirigida quedó perfilado al arco y mandó un disparo fuerte y colocado a la base derecha del poste. El cuestionado capitán Águila aumentó la ventaja en el marcador, al mismo tiempo que se sacudió la presión.
El 0-2 fue contundente, Querétaro no tuvo respuesta y América con una buena demostración de fútbol fue mejor en todos los aspectos, pero faltaba más. Tiro libre a favor del visitante, Aldrete y Sambueza se perfilaron para cobrar. El argentino pidió la pelota, tomó vuelo y con una educada pierna izquierda superó la barrera y dejó parado al portero, mientras el balón se metía en el ángulo superior izquierdo. Era el 0-3 para las Águilas, tercer gol de Rubens Sambueza con la playera del América y por si fuera poco era el tercer golazo consecutivo del tan, pero tan cuestionado refuerzo del conjunto de Coapa.
América estaba jugando, quizás, sus mejores minutos del torneo, el nuevo sistema de juego con dos puntas lo hizo ver más ofensivo y agresivo, tirado al frente y buscando goles que toda su gente quiere ver. La primera parte se fue con más aproximaciones americanistas al arco queretano pero sin anotación; si hubieran tenido un poco más de puntería los delanteros amarillos se pudo haber visto una goleada aún más escandalosa.
Para la parte complementaria la tónica del partido fue la misma, un América que tomó las riendas del juego y un Querétaro que simplemente esperó el silbatazo final, pues nunca tuvo reacción. Los capitalinos siguieron generando llegadas pero con el marcador a favor por momentos se veía un equipo un tanto conformista y sobrado en el terreno de juego. El balón sólo entró una vez más y fue por cuarta vez en la portería de Gallos Blancos. Christian Bermúdez vino de la banca para ponerle sentencia al juego y trás un rebote que dejó Benítez en el área chica, el "Hobbit" simplemente le dio el famoso pase a la red, suave y colocado el balón entró a las redes mientras las gargantas americanistas festejaron y las sonrísas volvieron a sus rostros.
América con facilidad superó 4-0 a un Querétaro que no ofreció nada, ni siquiera su líder, Carlos Bueno, pudo hacer daño, pues como es costumbre, se la pasó más tiempo reclamando que jugando al fútbol.
Este nuevo planteamiento de Herrera ilusiona a más de uno, nadie podrá negar que América lució en gran parte del juego. Parece que el técnico por fin encontró su once tipo, su plantel y táctica inicial. Sólo el tiempo dirá si lo de hoy lo pueden repetir o queda en una anécdota más.
Cabe resaltar el regreso de las "Águilas de oro". Raúl Jiménez y Diego Reyes volvieron bien y de buenas, los dos (como todo el seleccionado olímpico mexicano) están que no creen en nadie, viven un gran momento y debe aprovecharse. Sin duda, el cambio en el juego y en la actitud de América, fue en buena parte por el aporte de estos dos jóvenes con enorme futuro.
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